Con una suba moderada de la inflación, una familia tipo debió contar con más de $1,1 millones para superar la línea de pobreza y más de $500 mil para no ser indigente.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el INDEC reveló que durante el mes de junio de 2025 el aumento general de precios a nivel nacional fue del 1,6%, con una variación aún más moderada en la región del Nordeste Argentino (NEA), donde se registró una suba del 1,1%.
Entre los rubros que más se encarecieron durante el mes en el país, el primer lugar lo ocupó el sector Educación, con un incremento del 3,7%. Le siguieron Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con una suba del 3,4%, y Bebidas alcohólicas y tabaco, que aumentaron un 2,8%. También registraron subas destacadas Recreación y cultura (2,5%), Salud (2,2%), y Restaurantes y hoteles (2,1%).
En el NEA, sin embargo, el panorama fue distinto. La Educación también lideró los aumentos, aunque con una variación mensual menor al promedio nacional: 1,7%, pero con una notable suba interanual del 96,2%, la más alta de todo el país. A nivel mensual, el rubro que más subió en esta región fue Restaurantes y hoteles, con un alza del 3,1%, seguido por Vivienda, agua y electricidad (3,0%) y Salud (2,5%).
Por el contrario, Alimentos y bebidas no alcohólicas, que suelen tener un peso importante en los hogares, apenas se movieron en el NEA, con una variación mensual del 0,0%, frente al 0,6% del promedio nacional. Este dato explica en parte el menor índice general de inflación registrado en la región.
En cuanto a la variación acumulada en el año, el país registró un alza del 15,1%, mientras que el NEA mostró un incremento levemente inferior, del 13,2%. En términos interanuales, los precios subieron un 39,4% a nivel nacional y un 37,1% en el NEA.
La desaceleración del ritmo inflacionario continúa siendo un dato positivo, aunque el impacto en servicios regulados y sectores sensibles como educación, vivienda y salud sigue presionando el bolsillo de los consumidores, especialmente en algunas regiones del país.
Más de $1,1 millones para no ser pobres
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que durante el mes de junio de 2025 una familia tipo necesitó más de $1,1 millones para no caer bajo la línea de pobreza, y más de $500 mil para superar la indigencia, según la valorización mensual de la Canasta Básica Total (CBT) y la Canasta Básica Alimentaria (CBA) en el Gran Buenos Aires.
De acuerdo con el relevamiento oficial, la CBT, que determina el umbral de pobreza, registró un incremento del 1,6% mensual, mientras que la CBA, que define la línea de indigencia, subió un 1,1% en relación con mayo. En lo que va del año, ambos indicadores acumulan aumentos del 10,1% y 12,6%, respectivamente, y en los últimos doce meses, la suba fue del 29,2% en el caso de la CBT y del 28,7% en la CBA.
Los datos revelan con mayor detalle el impacto del costo de vida en distintos tipos de hogares. Por ejemplo, para un hogar tipo compuesto por un matrimonio y dos hijos en edad escolar (Hogar 2), el ingreso mensual necesario para no ser considerado pobre ascendió a $1.128.398,01, mientras que para no caer en la indigencia el umbral fue de $506.008,08.
En tanto, un hogar más numeroso, conformado por dos adultos y tres niños pequeños (Hogar 3), requirió $1.186.826,39 para superar la línea de pobreza y $532.209,15 para no ser indigente.
Incluso un hogar reducido, como el Hogar 1 —integrado por una mujer de 35 años, su hijo de 18 y su madre de 61—, necesitó $898.336,28 mensuales para no ser considerado pobre, y $402.841,38 para mantenerse por encima de la indigencia.
Estos datos reflejan el delicado escenario económico que atraviesan miles de familias en el país, donde el poder adquisitivo sigue siendo golpeado por el aumento persistente de precios, a pesar de una desaceleración en la tasa de inflación en los últimos meses
